El 2020 está por terminar, este ha sido un año atípico sin duda alguna, pero… ¿Qué lecciones puede tomar el sector inmobiliario?

Este se trató de un año donde lo inesperado fue la regla. La pandemia que durante todo el año azotó a todos los países del mundo trajo incertidumbre, desafíos, afectación económica a particulares y empresas… sin mencionar el desastre a nivel de salud que un escenario como este representa. Sin embargo, toda crisis impulsa la adaptación, y esto precisamente es lo que queremos analizar.

Adaptarse o morir

Esta frase, sacada del libro de Evelyn Segura llamado Adaptarse o morir: Los secretos de la naturaleza para sobrevivir en el mundo animal, aunque nada tiene que ver con los bienes raíces, pero representa muy bien lo que toda empresa de cualquier sector de la economía debió hacer para poder sobrevivir a un año como el 2020. Hablando del sector inmobiliario, la adaptación fue clave para evitar el declive. Y de esto podemos extraer diferentes lecciones que servirán para sobrellevar nuevos desafíos, especialmente, aceptar que la “viaja realidad” no volverá.

La tecnología, el mejor aliado

La tecnología no era un requisito sine qua non para llevar a cabo un proceso inmobiliario. La mayoría de las agencias inmobiliarias manejaban una página web y redes sociales, no mucho más.

Sin embargo, con la llegada de la pandemia, las restricciones de movilidad, el confinamiento prolongado, la distancia social y las diversas medidas gubernamentales pusieron en jaque la manera de trabajar que se venía manejando. Las agencias inmobiliarias debieron adaptarse a la nueva realidad.

La primera adaptación fue el aumento del flujo de tráfico hacia las plataformas digitales, con ello, la optimización de los sitios web y de las redes sociales. La incorporación de tecnología como chatbots o bots conversacionales fue un recurso que muchos comenzaron a incorporar. Estos simulan conversaciones humanas con los clientes, excelentes herramientas pueden resolver dudas sencillas y evitar que los clientes tengan que esperar mucho para ser atendidos.

El marketing inboud enfocado en el sector se hizo clave dentro de un sector con mucha competencia, especialmente ahora cuando las herramientas digitales se ponen a valer aún más. Y es que, no basta con tener una página web, para que los clientes lleguen a ellas el marketing de contenidos se comenzó a reforzar. Algo clave, en un momento donde compradores y vendedores se desenvuelven en más 90 % dentro del marco digital.

Más allá de las herramientas digitales

La tecnología no se queda en las herramientas digitales, los tours virtuales, los recorridos, fotografías y videos 360° también comenzaron a formar parte de la compraventa de viviendas. Además de esto, las reuniones virtuales, agente con vendedor/comprador también se unieron a la tendencia obligada de las videoconferencias.

Todo esto, y muchos otros recursos más, son los que se comenzaron a implementar dentro del sector inmobiliario. Y que dejaron una lección muy importante. Nadie estaba preparado para lo que la pandemia traería. Sin embargo, saber adaptarse a la situación, recurrir a los recursos adecuados y e innovar dentro de un sector que se había quedado dormido, sin aprovechar las ventajas y oportunidades que la tecnología puede ofrecer fue clave.