La industria inmobiliaria se encuentra activa los 365 días del año, y las 24 horas que componen un día. Sin embargo, es muy cierto que hay temporadas en las que se potencian más las ventas. Bien sea por variaciones en la economía, épocas festivas, nuevos reglamentos, tributos… En fin, son diversos factores los que intervienen.

Mucho se comenta que las épocas otoñales e invernales son las más ideales para adquirir una nueva propiedad. Pero, tratándose de los últimos meses del año ¿Será buena idea?  En esta nota le comentaremos más del tema.

¿Es otoño-invierno una buena fecha para comprar casa?

Antes de hablar concretamente de la estación otoñal-invernal, veamos por separado cómo es el comportamiento del mercado inmobiliario en ambas estaciones:

➢      Otoño

Desde septiembre hasta noviembre, es el momento perfecto para comprar un inmueble. De todas las estaciones del año, el otoño es la más competitiva cuando de bienes raíces se trata. Durante estos meses puede adquirir una casa, locales comerciales, oficinas o cualquier propiedad inmobiliaria. Pues en estas fechas, cualquier inversión en bienes raíces es ventajosa.

¿Por qué se da un alza en las ventas inmobiliarias en otoño?

Principalmente, porque en estos meses se termina la estación calurosa de verano y las vacaciones. Todos regresan a sus labores habituales, apareciendo los verdaderos inversionistas.

Justamente por eso, en esta época la competencia es baja, los precios son más accesibles y hay más compradores interesados en adquirir una vivienda de inmediato. Eso, sin contar que el acceso a créditos hipotecarios es más posible durante esta época. Pues las entidades financieras inician una competencia para ofrecer su mejor oferta a los potenciales clientes.

En definitiva, por sí solo, el otoño es una época perfecta para encontrar la casa de sus sueños. Le permite ahorrar al pagar un precio justo, además, puede conseguir una negociación satisfactoria.

➢      Invierno

Si bien no se le considera una mala época para adquirir una propiedad, la temporada otoñal ya ha acabado con las mejores propiedades. Por eso, en los meses invernales hay un menor stock de inmuebles. Los que quedan disponibles son aquellos que no han podido venderse en el resto del año.

Viéndolo desde el aspecto positivo, en estos meses los propietarios tienen más prisa por salir de los inmuebles. Así que están más dispuestos a negociar el precio, lo que puede suponer un ahorro económico. De este modo, podría obtener una exitosa transacción de compraventa.

Sin embargo, en esta época es más indispensable que realice una revisión previa al inmueble. Con el fin de cerciorarse que este se encuentra en condiciones habitables. Aun cuando quizás deba hacer una búsqueda exhaustiva, en invierno también hay opciones que podrían ajustarse a lo que está buscando.

Como ve, cada época del año trae sus propias particularidades al momento de invertir en bienes raíces. Pero, sin duda, otoño sigue posicionándose como la mejor temporada para comprar una propiedad inmobiliaria. Así que sí, la época otoño – invierno es una buena fecha para comprar.

 

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