Comprar una casa antigua no suele ser la primera opción de las personas que buscan una residencia. La preferencia por los acabados modernos y las construcciones nuevas usualmente supera el encanto de las casas con más de 50 años de construcción.

Sin embargo, siempre hay compradores que ven en estos inmuebles una buena inversión y la posibilidad de tener un hogar único y muy especial. Si ese es su caso, queremos ofrecerle una perspectiva sobre lo que implica adquirir una vivienda antigua.

¿Cuáles son las ventajas de comprar una casa antigua?

El mercado de casas antiguas suele ser más variado, por lo que es posible conseguir propiedades con estilos y tamaños diversos, dependiendo de las condiciones del mercado pueden llegar a ser inmuebles más económicos o con mayor margen de negociación. Es más probable que consigas una mejor ubicación, construcciones con una arquitectura con personalidad y lotes de terreno más extensos.

Las casas nuevas ofrecen beneficios en cuanto al rendimiento de los materiales empleados y la eficiencia energética. Sin embargo, pueden ser más pequeñas y los lugares disponibles para encontrarlas son más bien pocos y puede que muy alejados de las zonas céntricas. Los traslados a los trabajos se hacen más extensos y más caros en temas de inversión de tiempo y dinero en transporte o combustible.

Al comprar casa antigua puede vivir en su barrio soñado, el cual seguramente estará más constituido y desarrollado, con mejores servicios y acceso a distintos comercios y puntos de interés. Igualmente, la vivienda antigua es todo lo contrario a una casa de modelo, estandarizada y que, con todas las innovaciones posibles, puede lucir muy similar a cualquier otra.

Un inmueble que fue construido hace varias décadas puede llegar a tener un valor arquitectónico muy alto y detalles como pilares decorativos, molduras, diseños muy elaborados y hermosos detalles en la fachada y en el interior. Verdaderas joyas que podrían ser parte de su patrimonio y el de su familia.

Desventajas de comprar una casa antigua

Si hay algunos contras a los que le recomendamos permanecer atento:

La eficiencia energética, aspectos como el aislamiento para paredes y ventajas, sistemas de calefacción o de refrigeración pueden no existir en una casa antigua. Si los hay pueden ser muy viejos y de muy alto consumo energético. Por lo que renovar la casa para hacerla más eficiente requerirá de una alta inversión.

Las casas antiguas pueden tener problemas en su estructura, sistemas eléctricos y de tuberías, deterioros en el techo y paredes. Todo dependerá del mantenimiento que le haya otorgado su dueño anterior.

Los electrodomésticos pueden ser modelos viejos, al igual que el diseño de cocina y baños.

¿Le conviene comprar una casa de este tipo?

Dependerá del modelo de vivienda que consiga y su potencial. Hay casas que han sido modernizadas conservando los mejores aspectos de su arquitectura, otras tienen el potencial para mejoras, si usted cuenta con el tiempo y el presupuesto para ello.

¿Quiere una asesoría personalizada para tomar una decisión sobre este asunto? Estamos listos para asistirle en lo que necesite.