El 2019 ya está a poco de culminar, y desde ya, los pronósticos sobre qué será de la industria inmobiliaria en el año 2020 ha comenzado a salir a la luz. Uno de los más recientes pronósticos es que el precio de la vivienda se va a elevar en un 2.5%.
Un hecho que, acarrea una serie de efectos que es importante conocer si tiene pensado invertir en bienes raíces para el venidero año. Así que continúe leyendo esta nota para que tome sus previsiones a tiempo.
Funcas estima un aumento de 2.5% en el precio de las viviendas
Funcas, conocido como la Fundación de las Cajas de Ahorro, calcula que el precio de la vivienda española registrará un aumento promedio de 2.5%, que se mantendrá hasta el 2021. Por supuesto, es una situación que va a generar una serie de efectos.
Eso sí, Funcas menciona que este aumento se va a producir siempre que la elasticidad histórica del valor de la vivienda en relación al PIB (Producto Interno Bruto) se conserve. A su vez, también se prevé que se va a generar una moderación en referencia a las compraventas que se autoricen.
Los expertos que conforman Funcas, aseguran que la industria inmobiliaria española registra una fuerte predisposición a sufrir una ralentización que no afectaría ni la economía ni los controles bancarios.
Y aunque tanto el volumen de las operaciones inmobiliarias como el precio de venta se moderarían en los siguientes años, no van a caer. Con la salvedad de que en las zonas urbanas donde se ha generado una sobreestimación sí se producirían efectos.
Esta información se pudo conocer en el último número de Cuadernos de Información Económica.
La desaceleración de la economía ha provocado variaciones en bienes raíces
De acuerdo a Funcas, la ralentización del ritmo en el mercado de la vivienda se debe a la desaceleración de la economía española, y no al estallido de la burbuja, como se puede creer.
En el último número de Cuadernos de Información Económica se analizó la industria inmobiliaria y la financiación relacionada a él. Considerando la ralentización económica, Funcas vio oportuno recordar que la burbuja inmobiliaria y el riesgo financiero asociado al contexto del crédito, se convirtieron en el principal detonador de la primera crisis.
Aun cuando se está produciendo una desaceleración en la economía, no se han registrado los desbalances que caracterizaron y condujeron a la primera crisis. Por ende, tras años de recuperación económica se puede apreciar un ajuste limitado. El cual se origina por la moderación de la demanda.
De modo que la situación no es comparable a la vivida hace más de 10 años atrás, los precios son casi un 20% inferior. Además, el esfuerzo de los hogares españoles para reponer los créditos hipotecarios y cancelar los intereses se ha incrementado a un 33% de la renta disponible.
Teniendo en cuenta esta información podrá tomar sus previsiones por si desea invertir en la industria inmobiliaria para el año 2020.